Los exfoliantes mejoran la textura de la piel, destapa los poros y puede reducir la apariencia de líneas finas y arrugas. Es importante siempre humedecer la piel antes de exfoliarla para evitar dañar los capilares.
Café como exfoliante
Agrega un poco de café a una crema limpiadora. Humedece el rostro y realiza movimientos circulares. Lávate con agua tibia.
Exfoliante a base de leche y avena
Mezcla bien 2 cucharadas de leche en polvo, media taza de avena molida y una cucharadita de maicena. Agrega agua poco a poco hasta formar una pastita. Deja reposar la mezcla por un minuto. Aplica la mezcla en el rostro y el cuello con un masaje. Lávate con agua.
Exfoliante de granola
Haz una pasta con media taza de granola mezclada con un poco de agua caliente. Humedece tu rostro y aplícalo en el cutis con movimientos circulares. Lávate con agua tibia.
Exfoliante de linaza y miel
Para mantener los codos y las rodillas suaves y bellas mezcla 1 taza de miel con 1/2 vaso de agua tibia. Agrega 25 gramos de linaza y revuelve hasta tener una pastita. Pon la pasta en el refrigerador por tres horas. Frótate los codos y las rodillas con la pasta y déjala actuar por tres minutos. Lávate con agua destilada.
Exfoliante natural de azúcar moreno
Mezcla un poco de azúcar moreno con crema limpiadora. Con el rostro húmedo, aplica la mezcla con movimientos circulares. Lávate con agua tibia.
Azúcar y limón para exfoliar la piel
Pon dos cucharadas de azúcar en una taza y agrega el jugo de medio limón. Después de lavarte la cara, con el rostro aún húmedo, aplica la mezcla en la cara con movimientos circulares. Deja actuar por 5 minutos y lávate con agua tibia.
Suero de leche y sal
Mezcla suero de leche (buttermilk) con sal de mesa hasta tener una pastita. Humedece el rostro y aplica la mezcla con movimientos circulares. Este exfoliante natural te ayudará a reducir poros abiertos.
Exfoliar la piel con miel y avena
Mezcla un cuarto de taza de avena con una cucharadita de miel. Después de lavarte la cara, con el rostro todavía húmedo, aplica la mezcla y déjala actuar por 15 minutos. Lávate con agua tibia.
Exfoliante natural de azúcar y aceite de oliva
Mezcla 1/4 de taza de azúcar con 3 cucharadas de aceite de oliva. Aplícalo en todo el cuerpo con un masaje circular mientras te bañas.
Exfoliante de escaramujo
Este exfoliante es especial para quitar las patas de gallo. Viertes una cucharada de escaramujos secos (rosehips) en 1/2 taza de agua hirviendo. Se deja reposar por 15 minutos y se deja enfriar. Se aplica la infusión sobre las patas de gallo con los dedos y se deja por 3 minutos. Se quita con una telita húmeda.
Exfoliante para puntos negros
Se pone un poquito de pegamento sobre el punto negro y lo deja secar. Después lo jalas y se viene con todo y la suciedad. Además la goma blanca también es un buen exfoliante natural si se pone una capa delgadita sobre la piel, se deja secar y se jala con cuidado.
Exfoliante para todo el cuerpo
Este exfoliante natural es bueno para todo tipo de piel y se puede usar siempre que se desee. Es especialmente bueno para áreas a las que se les han hecho callos, las deja más suaves.
Lo único que necesitas es un cuarto de taza de sal de mar y un cuarto de taza de aceite de coco o de oliva. Se mezclan bien los dos ingredientes y se masajea el cuerpo (la piel debe estar húmeda) usando la mezcla.
No frotes la piel, solo masajéala hasta que se ponga rosadita. Enjuaga con agua tibia y seca con una toalla.
Exfoliante corporal de chocolate
Este exfoliante pulirá suavemente tu piel. El azúcar revelará una textura más lisa mientras que el aceite y el cacao rejuvenecerá el tono de tu piel.
Revuelve 1/2 taza de azúcar, 1/4 de taza de aceite de canola o de semilla de uva y dos cucharadas de cacao en polvo. Echalo en un frasco con tapa.
Cuando te bañes, humedece la piel y da un masaje al cuerpo con el exfoliante de chocolate. Enjuágate como de costumbre. La mezcla puede durar hasta cuatro días si se guarda bien tapado en un lugar fresco.