Henry Hoffman
Jueves, 6 de julio de 2017
Afasia
Sufrir un ictus es una situación aterradora, y deja a los supervivientes con un montón de retos que superar durante el proceso de recuperación. Uno de los efectos del ictus es la afasia -la pérdida de la capacidad de hablar o entender el habla- y es uno de los más frustrantes de tratar.
La afasia puede ser extremadamente estresante tanto para el individuo que ha sufrido el ictus como para sus familiares y amigos. El habla es una parte tan importante de la interacción humana, y es algo que la mayoría de la gente da por sentado. Es difícil poder comunicarse si uno ha dependido de la comunicación verbal y la suya se ve afectada de repente. Afortunadamente, la recuperación de la afasia es posible, y todavía hay maneras de comunicarse eficazmente, incluso con afasia.
La afasia se produce cuando hay daños en el cerebro -específicamente, en la mitad izquierda del cerebro, que es la parte que se ocupa del lenguaje. La afasia afecta principalmente a la capacidad de hablar, pero también puede dificultar la capacidad de escuchar, leer y escribir. La inteligencia del individuo no se ve afectada, sólo su capacidad de comunicación.
¿Qué causa la afasia?
La afasia suele ser consecuencia de un accidente cerebrovascular. Según la Asociación Nacional de Afasia, aproximadamente entre el 25 y el 40 por ciento de las personas que sufren un ictus desarrollan afasia. Sin embargo, la afasia no se limita a los pacientes con ictus. Cualquier tipo de lesión en la cabeza puede provocar el daño cerebral que causa la afasia, así como problemas que incluyen tumores cerebrales, infecciones, demencia o Alzheimer.
¿Cuáles son los tipos de afasia?
Hay dos tipos principales de afasia:
- afasia receptiva: cuando el individuo tiene problemas para entender lo que se dice
- afasia expresiva: cuando el individuo tiene dificultades para expresar lo que quiere decir
También es posible que un paciente con ictus tenga afasia mixta (una combinación de estas luchas) o afasia global, que es el término para un caso grave de afasia receptiva y expresiva.
Afasia receptiva
Imagínese estar en una habitación con sus amigos y familiares, pero cada uno de ellos está hablando un idioma extraño, extranjero. Tal vez reconozcas una palabra aquí o allá, pero te cuesta dar sentido a lo que se dice. Eso es lo que sienten las personas con afasia receptiva. Una persona con afasia receptiva puede seguir comunicándose, pero tiene muchas dificultades para entender lo que se le está comunicando.
La afasia receptiva es aún más difícil de tratar cuando las personas hablan con frases largas o complejas, si varias personas hablan a la vez o si hay demasiado ruido de fondo. Las personas con afasia receptiva pueden ser capaces de leer algo corto y sencillo, como el titular de un periódico, pero les cuesta leer el artículo en sí. Además, las personas con afasia receptiva pueden ser capaces de comunicarse escribiendo, pero luego pueden tener dificultades para leer lo que acaban de escribir.
Afasia expresiva
Las personas con afasia expresiva a menudo pueden entender las cosas que están escuchando o leyendo, pero son incapaces de responder adecuadamente. Pueden ser capaces de decir algunas palabras, pero les cuesta hablar en frases completas, y a menudo omiten palabras clave de su mensaje. En otros casos, alguien puede hablar con claridad y a un ritmo regular, pero lo que dice es en su mayoría un galimatías, con el significado previsto completamente perdido.
Otro aspecto frustrante de la afasia expresiva es la incapacidad de dar con la palabra correcta para la situación: puede estar en la punta de la lengua, pero no puede recordar la palabra que debe decir, o incluso puede decir una palabra que significa algo totalmente diferente de lo que estaba tratando de decir. Por ejemplo, un paciente con afasia expresiva puede decir «sí» pero en realidad quiere decir «no», o puede pedir un vaso de agua pero en realidad quiere un vaso de leche. Por supuesto, algunas personas con afasia expresiva no pueden hablar en absoluto. La gravedad de la afasia expresiva varía según el paciente.
¿Se puede recuperar la afasia?
Sí. La afasia no siempre es permanente y, en algunos casos, una persona que ha sufrido un ictus se recupera por completo sin necesidad de tratamiento.Este tipo de giro se denomina recuperación espontánea y es más probable que se produzca en pacientes que han sufrido un accidente isquémico transitorio (AIT). Un AIT es un tipo de ictus en el que el flujo sanguíneo al cerebro se ve inicialmente obstaculizado, pero se restablece con relativa rapidez, limitando así el daño causado. Sin embargo, la mayoría de los casos de afasia no son tan sencillos, y la recuperación completa puede no ser posible. En muchas situaciones, las capacidades lingüísticas no se restablecen rápida o completamente.
Algunos pacientes con ictus se beneficiarán de una recuperación espontánea parcial, pero quedarán con otros síntomas de afasia que no se resuelven. En casos como éste, la terapia del habla y el lenguaje puede ser de gran ayuda para intentar recuperar las capacidades lingüísticas con el tiempo. La musicoterapia es otro tipo de tratamiento que ha demostrado ser útil para la afasia. Cuanto antes se inicie el tratamiento, mejor, y por lo general los pacientes pueden seguir esperando conseguir mejoras a lo largo del periodo de dos años que sigue al ictus.
Otros factores que pueden influir en el éxito de una recuperación son la causa y la gravedad del daño cerebral, la zona concreta del cerebro que resultó dañada y la edad y la salud del paciente. Un paciente bien educado y motivado también suele tener más posibilidades de mejorar que un paciente con menos educación y motivación. Aunque la afasia puede ser difícil de tratar, es importante mantener una actitud positiva y trabajar duro con el logopeda.
¿Cómo pueden comunicarse las personas con afasia?
La afasia puede ser frustrante, pero la clave para un individuo que la sufre es mantener la calma. Aborde la comunicación con una mentalidad «lenta y constante». Dibuje o escriba las cosas, una palabra o idea a la vez. Utiliza accesorios si es necesario para facilitar la comunicación. Informa a tus seres queridos de lo que te funciona mejor para que todos estén de acuerdo. Ellos serán pacientes contigo, así que no te estreses si tienes problemas.
Un consejo útil es crear un libro de comunicación lleno de palabras, imágenes o símbolos que te ayuden a transmitir tu mensaje con mayor claridad, incluso si tienes dificultades. Si vas a salir y no vas a estar rodeado de amigos o familiares que entiendan tu afasia, puede ser útil llevar una tarjeta o un papel que indique que tienes afasia y explique en qué consiste. Guárdelo en su bolso o bolsillo, por si acaso se encuentra en una situación en la que tenga que explicar su condición a alguien.
¿Cómo puede comunicarse con alguien con afasia?
Tenga paciencia y trate a la persona con afasia como lo haría con cualquier otro adulto inteligente. Sí, tendrá que hablar más claro y despacio, pero recuerde que la afasia no suele afectar a las habilidades de pensamiento. Es posible que tengas que probar diferentes formas de transmitir tu mensaje, como dibujar o escribir cosas, o utilizar accesorios o símbolos. Tómate tu tiempo y haz todo lo posible para asegurarte de que la persona con afasia te entiende. Sigue siendo la misma persona inteligente que era antes de su ictus; sólo tiene problemas para comunicarse ahora.
Superar las barreras de comunicación
La afasia es una de las deficiencias más difíciles que se derivan de un ictus, pero las personas suelen ser capaces de recuperarse, al menos parcialmente, con la mentalidad y el tratamiento adecuados. Someterse a una terapia del habla y el lenguaje puede ser una ayuda importante para recuperar las capacidades de habla y comunicación, y tener un enfoque paciente y decidido tanto del individuo con afasia como de sus amigos y familiares puede ayudar mucho.
Recuerde que la afasia dificulta la comunicación, pero no la imposibilita. Hay maneras de evitar los efectos de la afasia, y un sinnúmero de individuos con afasia están viviendo vidas felices y satisfactorias a medida que continúan recuperándose de esta condición frustrante.
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