Ninguna dieta específica puede tratar la gastritis, pero el consumo de ciertos alimentos puede ayudar a mejorar los síntomas o evitar que empeoren.
Los cambios en la dieta pueden, por ejemplo, ayudar a proteger el revestimiento del estómago y a controlar la inflamación.
Alimentos que ayudan a prevenir la gastritis
El té verde y las frutas y verduras frescas pueden ayudar a proteger el cuerpo de la gastritis. Son buenas fuentes de antioxidantes, que pueden ayudar a evitar el daño celular y la enfermedad al reducir los niveles de compuestos inestables llamados radicales libres en el cuerpo.
Alimentos que pueden ayudar a inhibir el crecimiento de H. pylori y reducir la gastritis y la formación de úlceras incluyen:
- la coliflor, el colinabo, la col, los rábanos y otras verduras Brassica
- las bayas, como los arándanos, las moras, las frambuesas y las fresas
- la cúrcuma, una especia suave que puede tener propiedades antiinflamatorias
Los antioxidantes también pueden ayudar a prevenir una amplia gama de otras enfermedades. Aquí, aprende más sobre los antioxidantes y los alimentos que los aportan.
Alimentos que ayudan a prevenir los síntomas
La gastritis implica la inflamación del revestimiento del estómago. Por esta razón, una dieta antiinflamatoria puede ayudar a algunas personas.
No existe una única y mejor dieta antiinflamatoria. Para combatir la inflamación, hay que comer muchas frutas frescas, verduras y otros alimentos vegetales, que son ricos en antioxidantes. También es importante evitar los alimentos procesados y cualquiera que contenga grasas poco saludables y sal o azúcar añadidos.
Aprenda más sobre una dieta antiinflamatoria aquí.
Alimentos que ayudan a tratar la gastritis
Dos alimentos que pueden ayudar a tratar la gastritis son el brócoli y el yogur.
El brócoli contiene una sustancia química llamada sulforafano, que tiene propiedades antibacterianas. También contiene antioxidantes, que pueden ayudar a proteger contra el cáncer. Por este motivo, comer brotes de brócoli puede ayudar a aliviar o prevenir la gastritis y a disminuir el riesgo de cáncer de estómago.
Los autores de un estudio más antiguo, publicado en 2009, descubrieron que los participantes con infección por H. pylori que comieron 70 gramos -más de media taza- de brotes de brócoli al día durante 8 semanas tenían niveles más bajos de infección e inflamación que los que no comieron brócoli.
En 2006, otro equipo investigó si comer unas 2 tazas de yogur probiótico al día antes de utilizar una combinación de antibióticos podía potenciar la capacidad de la medicación para combatir la infección por H. pylori resistente a los medicamentos.
Después de 4 semanas, los investigadores descubrieron que los participantes que consumían el yogur y los antibióticos tendían a eliminar la infección de forma más eficaz que los que sólo tomaban antibióticos.
Los resultados pueden haberse derivado de los cultivos activos de bacterias beneficiosas del yogur que ayudan a mejorar la capacidad del organismo para combatir la infección.