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Cuentos de Lagartijas

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Una lagartija de cola de látigo de Nuevo México fotografiada en el este de Nuevo México. Este es probablemente un lagarto adulto. Los juveniles suelen tener la cola azul-verde. (Foto de Jerry Oldenettel)

Por Anthony Sena, profesor emérito, Northern New Mexico College

He notado bastantes lagartos de cerca, Sceloporus undulatus, en y alrededor de un pequeño arroyo que atraviesa mi patio y en las paredes de nuestra casa. Este es el lagarto más común que se ve alrededor de las casas y los jardines en el norte de Nuevo México. Las hembras de los lagartos de cerca ponen dos nidadas de huevos durante las temporadas de primavera y verano, por lo que ellas y los machos deben pasar mucho tiempo fuera de sus madrigueras durante el día. Como la mayoría de las lagartijas, son cautelosas y rápidas, pero si una persona no es amenazante o está temporalmente inmóvil, acaban por relajarse y corretean en busca de comida, parejas para aparearse y, si resultan ser machos, competidores potenciales.

Cuando los machos se encuentran con otros machos, realizan un ritual de comportamiento instintivo de flexiones de las extremidades delanteras y movimientos rápidos de la cabeza, que es interesante y divertido. También es divertido ver cómo se termorregulan al pasar de tomar el sol a la luz del sol a zonas de sombra cubiertas de plantas o ver cómo tocan con el hocico las gotas de agua de las plantas recién regadas.

Un lagarto de cerca trepando por una pared en el patio del autor. (Foto de Anthony Sena)

No beben activamente, prefieren dejar que la humedad se deslice por sus escamas hasta la boca. Parece que esta primavera hemos tenido un mayor porcentaje de vientos fuertes, lo que, en general, reduce los avistamientos de lagartijas. A las lagartijas les molesta el viento y una de las razones puede ser que, en general, hace mucho más difícil encontrar insectos. (¡A mí también me desagradan los vientos primaverales por el polen del enebro!)

El lagarto de cola de látigo de Nuevo México, Aspidoscelis neomexicanus, es el reptil del estado de Nuevo México. Su distribución en el estado sigue de cerca el Río Grande desde Española hacia el sur hasta Texas, con algunas poblaciones escasas y localizadas lejos del río en varios condados del suroeste de Nuevo México. En el norte de Nuevo México, la lagartija prefiere áreas de arbustos bajos y pastizales en un hábitat arenoso perpetuamente perturbado a lo largo del río.

La lagartija de Nuevo México es una especie partenogenética completamente femenina que fue producida por un apareamiento original de dos especies de lagartijas relacionadas pero distintas. Por ello, los lagartos de Nuevo México tienen la mitad de todos sus cromosomas derivados de un tipo de lagarto padre y la otra mitad de otra especie. En la mayoría de los casos, las hibridaciones de este tipo entre especies de vertebrados dan lugar a la esterilidad de la descendencia, pero a veces se producen resultados sorprendentes como la partenogénesis, o el «parto virgen», en el que todas las generaciones posteriores de la descendencia producida por el híbrido son genéticamente idénticas a la madre.

Distribución del lagarto cola de látigo de Nuevo México (Aspidoscelis neomexicanus) en Nuevo México. (Imagen de William G. Degenhardt, et al, de Amphibians & Reptiles of New Mexico)

En un par de estudios notables publicados en 1975, el Dr. Orlando Cuellar de la Universidad de Utah proporcionó evidencia de que las poblaciones de colas de látigo de Nuevo México eran más del 99% idénticas desde el condado de Río Arriba hasta el de Socorro. Estudios más recientes y actuales siguen mostrando muy poca variabilidad genética dentro de las poblaciones de esta especie. Algunas especies partenogenéticas han mostrado un fascinante ritual de pseudo-apareamiento en el que las hembras alternan comportamientos similares a los de los machos en determinados momentos de la temporada de «apareamiento». Este comportamiento está proporcionando detalles interesantes sobre las hormonas cerebrales y el desarrollo reproductivo, incluso en las partenoespecies totalmente femeninas como la cola de látigo de Nuevo México.

Una especie similar, la pequeña cola de látigo rayada, Aspidoscelis inornatus, que puede ser confundida con la cola de látigo de Nuevo México, se ve más comúnmente en el Valle de Española en áreas más alejadas del Río Grande, pero la pequeña cola de látigo rayada carece de la línea ondulada distintiva que se encuentra en la parte media de la espalda de la lagartija de cola de látigo de Nuevo México. Una nota interesante es que el pequeño lagarto rayado es la especie parental conocida (por el tamaño cromosómico y las características de las bandas) del lagarto de Nuevo México!

En mi vecindad inmediata, hay pocas áreas que proporcionan un fácil acceso a la ribera del río (la mayoría son tierras privadas o de los Pueblo), y por desgracia no he observado ningún lagarto de Nuevo México esta primavera.

Si usted observa un lagarto de Nuevo México u otro lagarto, ¡nos encantaría saberlo! Envía tu foto o historia a [email protected].

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