Ponerse delante de un espejo en una habitación oscura con una vela, cantando «Bloody Mary, Bloody Mary» no hará que aparezca un cóctel (¡por mucho que algunos esperen!). Sin embargo, según la leyenda, el ritual puede hacer que se materialice una espantosa aparición. ¿Eres lo suficientemente valiente como para probarlo tú mismo?
Muchas chicas en una fiesta de pijamas han jugado al juego del Bloody Mary, o al menos han oído hablar de él. Nadie sabe realmente desde cuándo se cuenta la historia de Bloody Mary, pero los historiadores empezaron a intentar rastrear las raíces de la historia en la década de 1970 . Los detalles del «juego» de Bloody Mary suelen variar, pero los principios básicos son siempre los mismos.
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El participante entra en una habitación oscura con una vela encendida. Se mira en un espejo mientras canta el nombre de Bloody Mary o una frase un número determinado de veces. Si el ritual se realiza correctamente, Bloody Mary puede aparecer en el espejo, salir del espejo y arañar la cara del participante, o ser liberada del más allá para perseguirle para siempre. Otras versiones de la historia incluyen que el espejo gotee sangre, que el pelo del participante se vuelva blanco o que el participante desaparezca sin dejar rastro.
A veces el ritual implica cantar simplemente «Bloody Mary», mientras que otras versiones implican cantar «Creo en Bloody Mary» o incluso «Maté a tu bebé, Bloody Mary.»
Los expertos en folclore que buscan los orígenes de la leyenda de Bloody Mary han dado con varias teorías.
Una visión única y bastante freudiana de la leyenda por parte del folclorista Alan Dundes sugiere que la historia es un ritual de iniciación a la mujer. Señala que la leyenda de Bloody Mary gira en torno a la aparición repentina de sangre, y que el ritual suele tener lugar en un baño con chicas que están justo al borde de la pubertad.
Sin embargo, otras teorías sitúan los orígenes de la historia en una perspectiva más histórica. Bloody Mary podría haber sido una de las siguientes mujeres, todas las cuales podrían tener una buena razón para volver del más allá para causar estragos entre los vivos:
- Mary Tudor (María I de Inglaterra), que condenó a muerte a muchos protestantes por herejía, lo que le dio el apodo de «Bloody Mary.»
- Elizabeth Bathory, también conocida como la «Reina de la Sangre», que supuestamente fue condenada por asesinar a cientos de niñas para poder bañarse en su sangre.
- Mary Worth, una bruja ejecutada en los juicios por brujería de Salem.
Independientemente de dónde empezara la historia, Bloody Mary proporcionó (y sigue proporcionando) muchas noches de emoción embrujada a cualquiera que se atreva a probarla. Con los otros elementos supersticiosos clásicos de los espejos y los rituales mágicos, Bloody Mary seguramente seguirá siendo una leyenda popular durante años.
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