El desplazamiento al rojo es una forma que utilizan los astrónomos para saber la distancia de cualquier objeto que esté muy lejos en el Universo. El corrimiento al rojo es un ejemplo del efecto Doppler.
Este es un ejemplo de desplazamiento al rojo. A la izquierda hay un rayo de luz del Sol, y a la derecha uno de una galaxia lejana. Como puede ver, todas las líneas se desplazan hacia el extremo rojo del espectro debido al desplazamiento al rojo.
La forma más fácil de experimentar el efecto Doppler es escuchar un tren en movimiento. Cuando el tren se mueve hacia una persona, el sonido que hace al acercarse a ella parece tener un tono más alto, ya que la frecuencia del sonido se aprieta un poco. A medida que el tren se aleja, el sonido se alarga y suena con un tono más bajo. Lo mismo ocurre con la luz cuando un objeto que emite luz se mueve muy rápido. Un objeto, como una estrella o una galaxia que está lejos y se mueve hacia nosotros, se verá más azul de lo normal. Esto se llama desplazamiento azul. Una estrella o galaxia que se aleja de nosotros se verá más roja de lo que se vería si la fuente no se moviera en nuestro marco de referencia. De ahí viene el nombre de corrimiento al rojo, ya que los colores se desplazan hacia el extremo rojo del espectro.
La razón por la que los astrónomos pueden saber cuánto se desplaza la luz es porque los elementos químicos, como el hidrógeno y el oxígeno, tienen huellas dactilares de luz únicas que no tiene ningún otro elemento. Los astrónomos utilizan la espectroscopia para analizar la luz de un objeto (galaxia o estrella). Una vez que lo saben, comprueban la diferencia entre el lugar donde se encuentran las líneas espectrales en comparación con el lugar donde se encuentran normalmente. A partir de ahí, pueden saber si se acerca o se aleja de nosotros, y también a qué velocidad va. Cuanto más rápido vaya, más lejos estarán las líneas espectrales de su posición normal en el espectro.