La introducción de las serpientes arbóreas marrones (BTS; Boiga irregularis) en Guam ha tenido impactos devastadores en la fauna nativa y en la infraestructura humana, lo que ha dado lugar a esfuerzos concertados para controlar las poblaciones y prevenir la propagación de esta especie invasora a otras islas. Estos esfuerzos de control, en particular las gotas aéreas de acetaminofén, pueden erradicar la BTS dentro de las áreas objetivo, pero las serpientes pueden repoblar esas áreas a través de la inmigración compensatoria. Por lo tanto, entender cómo el flujo de genes se corresponde con la dispersión puede añadir información crítica para maximizar la eficacia de los esfuerzos de control. Para examinar los patrones de dispersión de las STB en Guam desde una perspectiva genética, genotipamos 332 serpientes individuales en 22 loci de microsatélites para comprobar la presencia de barreras físicas (por ejemplo, carreteras) y la estructura genética espacial asociada a la dispersión restringida. Las serpientes arbóreas pardas experimentan un flujo genético suficiente en Guam para resistir cualquier barrera física fuerte, una probable interacción entre su gran tamaño poblacional y su capacidad para cruzar obstáculos físicos como las carreteras. Además, las BTS mostraron un aislamiento por distancia en toda el área de estudio, pero las capturadas en la Base de la Fuerza Aérea de Andersen, en el norte de Guam, parecían dispersarse al azar, independientemente del sexo. En general, las STB experimentan un alto flujo genético a través de Guam, especialmente en las zonas menos urbanizadas del norte de Guam. Por lo tanto, la inmigración compensatoria probablemente hará difícil la erradicación completa sin barreras antiserpientes.