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Fundada en 1915 por cuatro inmigrantes de Madeira que querían recrear las fiestas que eran tan comunes en los pueblos de su isla natal, esta tradicional reunión de mediados de verano para familiares y amigos se ha convertido en la mayor fiesta portuguesa del mundo y en el mayor festival étnico de Nueva Inglaterra. La fiesta atrae a cientos de miles de visitantes de todo el mundo. Presenta un delicioso menú de cocina portuguesa y entretenimiento continuo en cuatro lugares de actuación, incluyendo actuaciones de cabaret en el patio de nuestro museo. Además, presentamos un carnaval completo con atracciones y juegos. Cada año, el domingo, traemos el mayor desfile de la ciudad de New Bedford a las calles del North End.
En la Fiesta de este año, se espera que más de 200.000 visitantes entren en el recinto de la fiesta – todo ello sin coste alguno. La Fiesta con todo su entretenimiento sigue siendo un evento de entrada gratuita. Venga a verlo y traiga a su familia.
La Fiesta es una oportunidad para que todos compartan el rico patrimonio y los valores familiares de Madeira. Desde 1998, la Fiesta ha presentado una tarde especial de sábado de entretenimiento infantil. El programa del Día de la Familia de Walgreens ha crecido a lo largo de los años y este año está repleto de maravillosos entretenimientos que complacerán al niño que todos llevamos dentro.
Pase por la colorida Casa Santana. Recreada en el estilo arquitectónico de las casas de pueblo de Santana, Madeira, este edificio es el lugar donde servimos el mundialmente conocido Vino de Madeira.
O visite el Museo del Patrimonio de Madeira que estará abierto al público sin coste alguno durante toda la Fiesta. El Museo es el único de su tipo en América y alberga una amplia colección de fotografías y artefactos que cuentan la historia de la inmigración madeirense a los Estados Unidos.
Tómese un tiempo para disfrutar de la cocción de un pincho lleno de la mejor carne de barbacoa disponible. Nuestro pozo de barbacoa de 40 pies es único en su clase – todo construido y mantenido por los miembros del club. Las barracas (puestos de comida) que lo rodean y la latada (cenador de uvas) crean un ambiente del viejo mundo que es fiel a nuestra herencia madeirense.