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yulkapopkova
Imagina una escena relajante para calmar tu mente y tu cuerpo en momentos de estrés.
Imagina que pronto vas a dar una presentación al equipo ejecutivo de tu organización, y parece que no puedes concentrarte.
Estás nervioso y estresado, y cuando intentas ensayar tus líneas iniciales, tu mente se queda completamente en blanco. Cuanto más intentas practicar tu material, más estresado te sientes
Así que te tomas un descanso, cierras los ojos y recuerdas las últimas vacaciones que te tomaste en las montañas. Piensas en el suave arroyo donde te detuviste a descansar. Oyes el canto de los pájaros, hueles el aire puro y sientes el calor del sol en tu piel. Poco a poco empiezas a relajarte al imaginar esta tranquila escena, y tu ritmo cardíaco y tu respiración se ralentizan. Cuando abre los ojos unos minutos más tarde, se siente relajado y en control, y no tiene problemas para recordar sus frases iniciales.
¿Alguna vez ha utilizado su imaginación para escapar, o hacer frente a una situación estresante? Si es así, estabas utilizando la «imaginación guiada» para relajarte. En este artículo, veremos cómo utilizar la imaginación para manejar el estrés, y discutiremos cómo puede utilizar esta técnica para hacer frente a situaciones difíciles.
¿Qué es la imaginería guiada?
La imaginería guiada es una técnica de manejo del estrés, en la que usted utiliza su imaginación para imaginar una persona, lugar o momento que le hace sentir relajado, tranquilo y feliz. La imaginería es ligeramente diferente de otras técnicas de gestión del estrés, ya que se basa en el uso de todos tus sentidos.
Por ejemplo, en tu imaginación oyes el sonido de los pájaros piando, ves las gotas de rocío en la hierba, sientes la brisa en tu piel, hueles las flores silvestres y saboreas la bebida fría. En la imaginería, el uso de todos los sentidos es lo que crea una experiencia tan poderosamente relajante, y es por eso que es tan útil para manejar el estrés y hacer frente a situaciones difíciles.
Hay varias otras maneras en que usted puede utilizar la imaginería para ayudarle a relajarse. Por ejemplo, puede crear imágenes mentales del estrés fluyendo fuera de su cuerpo, o de sus problemas, sus distracciones y sus preocupaciones diarias siendo dobladas y guardadas en un cofre con candado.
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Algunas personas son escépticas sobre la efectividad de usar imágenes. Sin embargo, la investigación sugiere que puede ser increíblemente eficaz para reducir sus niveles de estrés.
Por ejemplo, un estudio encontró que el uso de técnicas de manejo del estrés junto con imágenes de relajación, e incluso sólo el uso de imágenes por sí solo, redujo significativamente la presión arterial de los participantes. Otro estudio, que investigó la eficacia de la imaginería en pacientes con cáncer de mama, encontró beneficios similares: las pacientes que utilizaron la imaginería para hacer frente a su enfermedad experimentaron menos estrés, más vigor y una mayor calidad de vida que las que no utilizaron la técnica.
Además de estos ejemplos, muchos otros estudios han utilizado con éxito la imaginería para reducir el estrés en pacientes que sufren el síndrome de estrés postraumático, abuso, depresión y otras condiciones, incluyendo el estrés laboral.
Nota:
La imaginería es similar a la visualización , en el sentido de que estás utilizando tu imaginación para un propósito específico, sin embargo, la visualización está más centrada en un resultado definido. La gente utiliza las técnicas de visualización para imaginar la consecución de objetivos o la superación de una situación con un resultado exacto en mente. Ambas son útiles, pero la imaginación guiada es más relevante para manejar el estrés.
Cómo usar la imaginación guiada
Paso 1: Encontrar un lugar tranquilo
Si es posible, encuentre un lugar tranquilo para sentarse. Puede ser un banco del parque, una habitación vacía o incluso su oficina. Cierre los ojos y respire lenta y profundamente para calmarse.
Paso 2: Elija su entorno
Una vez que se sienta relajado, imagínese en el entorno más tranquilo que pueda imaginar. Puede ser un lugar imaginario o un recuerdo de un lugar o momento que tenga un significado especial para usted.
La escena que imagina es muy personal e idealmente debería ser una a la que se sienta emocionalmente atraído. Sin embargo, si tiene problemas para pensar en una imagen, considere la posibilidad de utilizar las siguientes:
- Relajándose en una soleada playa tropical, escuchando las olas y clavando los dedos de los pies en la arena.
- Acostándose en un sillón en una cabaña remota, rodeado de montañas y nieve, y relajándose frente al fuego con una taza de cacao caliente.
- Ir de picnic con su familia en su lugar secreto favorito.
- Sentarse junto a una cascada en lo profundo del bosque, sintiendo la suave humedad contra su cara y escuchando a los pájaros.
Es importante recordar que la eficacia de las imágenes se basa en el uso de todos sus sentidos.
Por ejemplo, no se limite a imaginarse en la remota cabaña de la montaña. En su imaginación, mire a su alrededor. Preste atención a la sensación rústica de la habitación. Siente el calor del fuego contra tu piel e inhala el aroma almizclado y terroso del humo de la madera. Toca la acogedora manta, saborea el dulce chocolate caliente y mira por la ventana a los ciervos que encuentran comida en la nieve. Experimenta la sensación de no tener nada más que hacer que comer, leer y salir a caminar con raquetas de nieve.
Tu objetivo es sumergirte completamente en la escena: esto incluye lo que puedes ver, saborear, tocar y oler, así como lo que sientes. Cuantos más detalles pueda incluir en sus imágenes, más eficaz será esta técnica.
Consejo:
Tenga en cuenta que cuando empiece a utilizar las imágenes, puede resultar extraño y puede tener dificultades para sumergirse completamente en la escena imaginada. Con la práctica, esto se hará más fácil; su imaginación se hará más fuerte, y será capaz de entrar en un estado de relajación más rápidamente.
Paso 3: Relajación
Permanezca en su escena relajada durante el tiempo que se sienta cómodo, o el tiempo que su horario le permita. Continúe respirando profundamente, y trate de no dejar que ningún pensamiento externo se entrometa.
Cuando esté listo para salir, siéntese en silencio, y deje que su mente vuelva a la situación en cuestión. Ahora se sentirá mucho más relajado, con el control y listo para afrontar sus retos.
Puntos clave
La imaginería guiada es una técnica útil para manejar el estrés y afrontar situaciones difíciles. En esta técnica, usted imagina una escena, un momento o un lugar que sea tranquilo y que tenga una conexión emocional con usted.
Paso 1: Encuentre un lugar tranquilo.
Paso 2: Elija su escenario. Imagínese allí, utilice todos sus sentidos para sumergirse en la experiencia e incluya tantos detalles como sea posible.
Paso 3: Relájese, durante el tiempo que le permita su agenda.
Tenga en cuenta que la imaginería es más efectiva cuando utiliza todos sus sentidos. Cuantos más detalles pueda incluir en su escena imaginada, más fácil le resultará relajarse.
El estrés puede causar graves problemas de salud y, en casos extremos, la muerte. Aunque se ha demostrado que estas técnicas de gestión del estrés tienen un efecto positivo en la reducción del mismo, sólo tienen carácter orientativo, y los lectores deben seguir el consejo de profesionales de la salud debidamente cualificados si les preocupan las enfermedades relacionadas con el estrés o si éste les causa una infelicidad importante o persistente. También se debe consultar a los profesionales de la salud antes de realizar cualquier cambio importante en la dieta o en los niveles de ejercicio.