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La guía definitiva de suplementos para el autismo

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Guía de suplementos para el autismo

Según los CDC, los trastornos del espectro autista (TEA) afectan aproximadamente a 1 de cada 40 niños.

El autismo es una condición crónica que impacta en la interacción social, el lenguaje y la comunicación. Los niños con autismo también pueden tener comportamientos estereotipados/repetitivos.

Existen varias opciones de tratamiento prometedoras para los niños con autismo, que incluyen, entre otras, la terapia conductual, la terapia ocupacional y del habla, la terapia de juego y las opciones de medicación para controlar los síntomas conductuales.

¿Pueden los suplementos dietéticos ayudar con los síntomas autistas?

suplementos

Otra opción que ha demostrado ser muy útil es la mejora de la dieta, tanto a través de cambios en la misma como de suplementos.

Mejorando la dieta a través de mejores elecciones de alimentos y eligiendo suplementos específicos para tratar los síntomas autistas, puede ayudar a su hijo a manejar mejor los desafíos diarios.

En este artículo, exploraremos en profundidad los suplementos dietéticos más comunes utilizados por las familias con niños con autismo.

Hay que tener en cuenta que antes de comenzar cualquier tipo de régimen de suplementos para su hijo, siempre es importante consultar con su pediatra.

¿Tiene un suplemento específico que está buscando? Haz clic en el nombre de abajo para saltar a esa sección:

  1. Vitamina D
  2. Oxitocina
  3. Vitamina B-6 y Magnesio
  4. Melatonina
  5. Omega-3 y aceite de pescado
  6. N-acetilcisteína (NAC)
  7. Sulforafano (extracto de brotes de brócoli)
  8. Metil Vitamina B-12
  9. DMG y TMG
  10. Viatmina C
  11. Probióticos
  12. Enzimas digestivas

Suplementos a tener en cuenta para el autismo

Vitamina D

Se ha descubierto que la vitamina D tiene un efecto sobre los neurotransmisores del cerebro. Ayuda al cerebro a formar nuevas conexiones y a fortalecer las que ya están presentes.

Muchos estudios han demostrado que los niños con autismo a menudo tienen déficits de vitamina D. En un estudio reciente, se encontró que los niños con autismo que recibieron un suplemento diario de vitamina D vieron una disminución de los síntomas principales asociados con el autismo, incluyendo el deterioro de la interacción social, la comunicación y la participación en comportamientos repetitivos.

Los resultados de este estudio indican que una dosis adecuada de suplemento de vitamina D podría ayudar a mejorar algunos de los síntomas principales asociados con el TEA y puede ser un tema a discutir con el médico de su hijo.

Oxitocina

La oxitocina es una sustancia química que se produce naturalmente dentro del cerebro. Esta sustancia química tiene un efecto en la parte del cerebro asociada con el vínculo social y las interacciones sociales.

Hay pruebas preliminares que relacionan un sistema de oxitocina comprometido con algunos niños con trastorno del espectro autista, sin embargo, se necesita más investigación para determinar por qué sólo algunos niños lo demuestran. Además, los estudios que implican el tratamiento con oxitocina para los niños con autismo no han sido concluyentes, ya que algunos niños muestran mejoras moderadas en la función social.

Los autores de estos estudios indican que el tratamiento con oxitocina podría ser una opción prometedora en términos de mejora de ciertos comportamientos sociales, sin embargo, se necesitan más estudios clínicos para establecer la eficacia.

Vitamina B6 y Magnesio

La vitamina B6 es responsable de mejorar más de 60 procesos biológicos diferentes en el cuerpo. La vitamina B6 se encuentra en las típicas multivitaminas, pero también se puede complementar.

Esta vitamina se descompone en el cuerpo por una enzima (PLP), y algunas investigaciones sugieren que esta enzima no es tan efectiva en los niños con autismo. La enzima PLP es necesaria para la correcta producción de dopamina en el cuerpo, que ayuda a controlar los centros de recompensa del cerebro.

El magnesio también es un nutriente vital, que asegura el correcto funcionamiento del cerebro y las células musculares. El magnesio se encuentra en muchos alimentos, especialmente en las semillas y los frutos secos, los cereales integrales y las verduras de hoja verde.

Algunos estudios han indicado que los niños con autismo pueden tener una deficiencia de magnesio, aunque todavía se desconoce la causa específica.

La vitamina B6 y el magnesio se suelen complementar juntos, ya que la B6 a veces puede causar síntomas desagradables, como el malestar estomacal, y el magnesio parece contrarrestarlo.

La investigación es variada en lo que respecta a la eficacia de estos suplementos para los niños con TEA. Dos estudios pequeños, pero bien controlados, no encontraron efectos de la terapia combinada de vitamina B6 y magnesio. Otro estudio más grande, pero menos riguroso, encontró un aumento en el comportamiento positivo en los niños que tomaron estos suplementos.

Los Suplementos para el Sueño de Harkla tanto la Vitamina B6 como el Magnesio.

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Melatonina

La melatonina es una hormona producida en el cuerpo que se encarga de regular nuestros ciclos de sueño y vigilia.

A menudo, los niños con autismo tienen dificultades con el sueño y, por lo tanto, se utiliza con frecuencia para tratar el insomnio, o la dificultad para conciliar el sueño y/o permanecer dormido).

Varios estudios han encontrado una relación entre los niveles bajos de melatonina y la gravedad de los síntomas del autismo en los niños. Las investigaciones que examinan la eficacia de los suplementos de melatonina para el TEA han sido prometedoras, con varios estudios de buen control que indican una mejora en la duración del sueño y comportamientos diurnos más positivos. En estos estudios, se encontró que los efectos secundarios de la melatonina eran mínimos o nulos, lo que también es prometedor.

Como con todos los suplementos, es importante hablar con el pediatra de su hijo con respecto a la dosis adecuada y el programa de dosificación antes de comenzar cualquier tipo de régimen.

Omega- 3/Aceite de pescado

Los ácidos grasos Omega 3 son esenciales para el desarrollo del cerebro y los ojos en los seres humanos.

Ácidos grasos Omega 3

Dos tipos de Omega 3 se encuentran en el marisco, mientras que el tercer tipo se encuentra en los aceites vegetales. Varios estudios han demostrado que, en comparación con un grupo de control, los niños con autismo tienen niveles bajos de ácidos grasos omega 3 en sus sistemas. El aceite de pescado es la vitamina que se puede adquirir sin receta médica como forma de complementar los omega 3.

En un estudio de control aleatorio de 2007, sólo se encontraron beneficios marginales en los niños con autismo que tomaron un suplemento de aceite de pescado. Además, otros estudios recientes no mostraron ninguna mejora en el comportamiento de los niños que tomaron suplementos de aceite de pescado. Aunque la suplementación con omega 3 es una de las más utilizadas para los niños con autismo, existe una evidencia muy limitada que apoye los beneficios de su uso para los niños con autismo.

NAC

La N-acetilcisteína (NAC) es un suplemento que aumenta los niveles del principal antioxidante del cuerpo. Este antioxidante se encarga de contribuir al sistema de defensa natural del cuerpo, ya que protegen al organismo de los daños producidos por los «radicales libres».

Se ha pensado que los niños con autismo pueden tener niveles más bajos de este antioxidante, lo que sugiere que la suplementación con NAC podría aportar beneficios.

Un prometedor estudio realizado en la Universidad de Stanford estudió los efectos de la NAC en 31 niños con autismo. El estudio descubrió que la suplementación con NAC disminuía la irritabilidad en los niños con autismo y reducía la participación de los niños en comportamientos repetitivos.

También se han completado varios estudios de casos que sugieren que la NAC puede ayudar a mejorar ciertos síntomas en los niños con autismo. Aunque los estudios de casos no se consideran muy rigurosos, esto ofrece pruebas prometedoras de que la NAC puede ser una opción a tener en cuenta.

Sulforafano

El sulforafano es un compuesto natural que se encuentra en ciertas verduras, como los brotes de brócoli. También se vende como un suplemento, a menudo llamado «extracto de brotes de brócoli». Curiosamente, se ha descubierto que la fiebre puede mejorar los síntomas del autismo y los investigadores descubrieron que el sulforafano puede desencadenar cambios celulares a menudo asociados con la fiebre.

Los primeros informes de un estudio de control aleatorio indican que el 31% de los participantes que tomaron sulforafano como suplemento mostraron mejoras en la interacción social, la comunicación y una reducción del comportamiento agresivo. Otro estudio riguroso encontró que el 65% de los participantes que tomaron sulforafano mejoraron significativamente, específicamente en el área de la capacidad de respuesta social.

Actualmente, hay varios estudios que investigan más a fondo los efectos de la suplementación con sulforafano en los síntomas de los niños con autismo, con la esperanza de que más pruebas aporten respuestas más concluyentes a las familias interesadas en probar este suplemento.

Metil B-12

Las vitaminas B-12 son una «familia» de vitaminas que desempeñan cada una un papel importante en el funcionamiento del sistema nervioso y del organismo. La metil B-12 tiene la capacidad de actuar en vías específicas dentro del cerebro, lo que resulta en más combustible o energía para ciertos procesos cerebrales. También interactúa con el ácido fólico para producir células en el cuerpo.

Se ha descubierto que los niños con retrasos en el desarrollo tienen una alteración relacionada con el procesamiento de metil B-12 dentro del cuerpo. El metil B-12 se administra en forma de inyección, como una forma de estimular las vías deterioradas.

Un estudio de control aleatorio de 2016 examinó los efectos de los suplementos de metil B-12 para los niños con autismo. Los resultados mostraron que los niños que recibieron el suplemento mejoraron clínicamente en varias categorías de comportamiento, incluyendo la capacidad de respuesta social.

Los resultados del laboratorio de sangre también confirmaron que los niños a los que se les administró Metil B-12 tuvieron una mejora en ciertos procesos metabólicos y celulares. Una vez más, esta investigación es prometedora, sin embargo, todavía está en las etapas iniciales.

También hay que tener en cuenta que algunos niños que reciben inyecciones de Metil B-12 experimentan efectos secundarios como hiperactividad, trastornos del sueño y comportamiento autoestimulante. Es importante discutir los riesgos y beneficios de cualquier suplemento con el pediatra de su hijo.

DMG/TMG

DMG y TMG son sustancias que se encuentran en los alimentos, concretamente en el arroz integral y el hígado. Se ha descubierto que estas sustancias mejoran ciertos comportamientos, reducen las convulsiones y mejoran el lenguaje cuando se toman como suplemento.

Las investigaciones han demostrado que la DMG y la TMG pueden ayudar a mejorar el sistema inmunológico, lo que puede reducir las convulsiones. Otro estudio bien controlado documentó una disminución clínicamente significativa de los comportamientos no deseados mientras se tomaban estos suplementos.

Es importante tener en cuenta que algunos niños toleran más la DMG que la TMG y que estos suplementos deben equilibrarse adecuadamente con ácido fólico y vitamina B12. El pediatra de su hijo podrá tratar este tema.

Vitamina C

La vitamina C juega un papel importante en el cuerpo humano, ya que apoya la producción de neurotransmisores (sustancias químicas que ayudan a nuestras células a comunicarse) y ayuda a proteger el cuerpo contra los radicales libres. La vitamina C también es esencial para un sistema inmunológico sano.

vitamina c

Se ha sugerido que algunos niños con autismo pueden tener una deficiencia de vitamina C. Una teoría es que los niños con autismo tienen dificultades para combatir los radicales libres en su cuerpo, lo que puede causar un desequilibrio en el cuerpo.

Un estudio encontró que los niños con autismo que tomaron suplementos de vitamina C vieron una reducción significativa en los comportamientos estereotipados como el balanceo, el aleteo de las manos y el paseo. El tamaño de la muestra en este estudio fue relativamente pequeño (18 participantes), por lo tanto, se necesita más investigación para examinar más a fondo la relación entre el autismo y la suplementación de vitamina C.

La importancia de un intestino sano para el autismo

Si ha leído nuestro artículo sobre la salud intestinal, sabe que las bacterias intestinales tienen un gran impacto en la salud general e incluso en el comportamiento de las personas con autismo. Es una composición diversa de diferentes cepas de bacterias, donde algunas son buenas y otras son malas. Para mejorar la salud intestinal de su hijo aumentando las bacterias buenas, considere lo siguiente:

Probióticos

Muchos niños con autismo luchan con problemas gastrointestinales (GI), como dolor de estómago, estreñimiento y diarrea. Hay muchas hipótesis sobre la causa de estos síntomas, incluyendo la inflamación y los microbios anormales que se encuentran en el tracto digestivo.

Las bacterias intestinales que se encuentran dentro del tracto gastrointestinal en realidad actúan como mensajeros, enviando señales y comunicándose con diferentes partes del cuerpo, incluyendo el cerebro. Se cree que un desequilibrio de estas bacterias en el intestino puede tener un efecto en áreas como el estado de ánimo, la atención, el estrés y el sueño.

Se necesita más investigación sobre las posibles causas, sin embargo, está claro que los problemas gastrointestinales son una ocurrencia común en los niños con TEA. Los probióticos son microorganismos vivos que pueden proporcionar beneficios para la salud cuando se consumen. Generalmente, se encuentran en forma de suplemento en polvo, pero también se encuentran en alimentos como el yogur.

Los probióticos ayudan a mejorar o restaurar el equilibrio en el tracto gastrointestinal. La investigación más prometedora en relación con los probióticos y el autismo ha implicado estudios en animales. Un estudio riguroso descubrió que el uso de una determinada cepa de probióticos reducía realmente algunos comportamientos similares al autismo en ratones, como la evitación social y las acciones repetitivas. Esta investigación aún no se ha ampliado a los seres humanos, sin embargo, indica que el uso de probióticos puede ser un suplemento beneficioso para los niños con autismo.

Enzimas digestivas

Otro suplemento asociado con los problemas del tracto digestivo que se encuentran en los niños con autismo son las enzimas digestivas. La terapia de enzimas digestivas se ha utilizado como un mecanismo para eliminar las proteínas dañinas del cuerpo. Estas proteínas pueden contribuir a algunos de los problemas digestivos encontrados en los niños con autismo.

En un ensayo de control aleatorio en el que participaron 100 niños con autismo, se descubrió que recibir una terapia de enzimas digestivas durante 3 meses mejoraba las respuestas emocionales y los síntomas gastrointestinales. La terapia enzimática también puede combinarse con la administración de suplementos probióticos como forma de promover aún más la salud digestiva.

Pensamientos finales

Después de leer sobre los suplementos para niños con autismo, es posible que se pregunte por dónde empezar y cuáles son las opciones más eficaces.

Hay muchos suplementos prometedores disponibles en el mercado para niños con autismo, sin embargo, puede ser difícil tamizar la literatura con el fin de determinar el mejor enfoque de tratamiento posible.

En la mayoría de los casos, sólo se han realizado unos pocos estudios sobre la eficacia, lo que a menudo conduce a más preguntas como padre. El mejor lugar para empezar es el pediatra de su hijo.

Su pediatra examinará el historial médico de su hijo, los síntomas conductuales actuales y pasados, y el curso actual del tratamiento. Después de examinar cuidadosamente estos factores, su pediatra podrá ayudarle a sopesar los beneficios y los riesgos de ciertos suplementos y a determinar las dosis adecuadas que pueden ayudar a su hijo.

La esperanza es que este artículo le haya proporcionado una visión general completa de los suplementos más utilizados para los niños con autismo para que pueda seguir trabajando con el médico de su hijo para determinar el mejor enfoque de tratamiento. Incluso podría ser una buena idea imprimir este artículo y llevarlo a la próxima cita con el médico de su hijo!

Si ha visto los beneficios de la suplementación con su propio hijo, nos encantaría saber de usted. Deja un comentario abajo para hacérnoslo saber!

Bent, S., Bertoglio, K., & Hendren, R.L. (2008). Ácidos grasos omega-3 para el trastorno del espectro autista: Una revisión sistemática. Journal of Autism and Developmental Disorders, 39 (8), 1145-1154. (Enlace al estudio)

Li, Y.J., Ou, J.J., LI, Y.M., & Xiang, D.X. (2017). Suplemento dietético para los síntomas centrales del trastorno del espectro autista: ¿Dónde estamos y hacia dónde debemos ir? Fronteras en Psiquiatría, 155,27-55. (Enlace al estudio)

Lynch, R. et al. (2017). El sulforafano del brócoli reduce los síntomas del autismo: Una serie de casos de seguimiento de un estudio aleatorio doble ciego. Avance global en salud y medicina, 6,119-130. (Enlace al estudio)

Navarro, F., Liu, Y., & Rhoads, J.M. (2016). Pueden los probióticos beneficiar a los niños con trastornos del espectro autista? Revista mundial de gastroenterología, 22(46), 1093-1110.

Saad, K. et al. (2015). Un ensayo aleatorizado y controlado con placebo de enzimas digestivas en niños con trastornos del espectro autista. Neurociencia clínica psicofarmacológica, 13(2), 188-193. (Enlace al estudio)

Young, L.J. & Barrett, C.E. (2015). Puede la oxitocina tratar el autismo? Science, 347,825-828. (Enlace al estudio)

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