El chocolate tiene algunos ingredientes principales como: azúcar añadido, manteca de cacao y licor de chocolate. A todo el mundo le gusta un trozo de chocolate de vez en cuando, e incluso es posible que tenga un antojo de chocolate durante la lactancia. Durante la lactancia se puede consumir chocolate en cantidades moderadas, pero hay que vigilar de cerca si el bebé se encuentra bien después de comer chocolate, al igual que con cualquier otro alimento. Cuando las mujeres que dan el pecho comen chocolate, a veces los bebés experimentan vómitos, diarrea o náuseas. Algunos bebés no experimentan ningún efecto secundario, pero varía según el bebé. Si tu bebé experimenta efectos secundarios, es importante que dejes de comer chocolate porque no le sienta bien al bebé.
¿Por qué el chocolate afecta a los bebés? El chocolate contiene cafeína y esa es la razón principal por la que los médicos creen que el chocolate incomoda a los bebés. Una mayor ingesta de cafeína durante la lactancia no sólo puede incomodar al bebé, sino que también puede disminuir la producción de leche. Dado que el bebé aún se está desarrollando, tarda más tiempo en eliminar la cafeína de su organismo. Si está comiendo chocolate durante la lactancia y nota que su bebé no está durmiendo bien, es posible que sea la cafeína del chocolate la que no deja dormir a su bebé.
No sólo la cafeína del chocolate puede hacer que su bebé esté inquieto o incómodo, sino también algo llamado teobromina. La teobromina se encuentra en el cacao en polvo y tiene un efecto similar al de la cafeína en tu bebé. ¿Qué hacer si te apetece tomar chocolate negro durante la lactancia pero los efectos secundarios del chocolate negro afectan a tu bebé? Puede cambiar el tipo de chocolate por otro que no sea negro. El chocolate blanco no contiene teobromina y tiene un nivel de cafeína más bajo que el chocolate negro.
Sólo recuerda que cada bebé es diferente y algunos pueden no verse afectados por el chocolate tanto como otros bebés. Ten cuidado con tu consumo de chocolate y cafeína si tu bebé está inquieto, incómodo o su horario de sueño está alterado. ¡Si no es así, disfruta del chocolate a un ritmo saludable y siempre es una buena idea consultar con tu pediatra y/o asesor de lactancia si no estás segura de la ingesta de chocolate!