Ayer fue el Día Nacional del Té Helado.
Cuando crecía, mi madre preparaba su té helado en el porche delantero al sol. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) llaman al té que ella hacía «té al sol».
En 1996, los CDC publicaron un «Memo sobre la contaminación bacteriana del té helado». El memorándum estaba dirigido a los epidemiólogos estatales y territoriales, y proporcionaba información sobre la seguridad del té helado en respuesta a las solicitudes de los departamentos de salud locales y estatales de directrices sobre la preparación y el almacenamiento del té helado de manera que se redujera la contaminación bacteriana.
Los patógenos transmitidos por los alimentos pueden sobrevivir en el té preparado, pero para el té preparado a una temperatura adecuada -con agua lo suficientemente caliente como para matar a los patógenos- la cuestión de la seguridad depende principalmente de las condiciones de almacenamiento y de asegurarse de que el dispensador de té se ha limpiado y desinfectado antes de su uso.
Los CDC resumieron sus conclusiones sobre la seguridad del té helado con los siguientes puntos:
1. El té es una bebida con pocos antecedentes de transmisión de enfermedades. En la actualidad, no se han notificado a los CDC brotes de infección claramente asociados al consumo de té.
2. Las hojas de té pueden estar contaminadas con bacterias coliformes. Si el té helado se elabora a temperaturas inadecuadas o en una urna mal limpiada, o si se almacena durante demasiado tiempo, puede cultivar bacterias coliformes, más frecuentemente Klebsiella y Enterobacter, y menos comúnmente E. coli. En particular, el grifo de las urnas de té helado puede constituir un nido para la contaminación bacteriana.
3. Los errores de manipulación de los alimentos que conducen a la introducción o que favorecen la replicación de patógenos microbianos en el té elaborado podrían, en teoría, dar lugar a enfermedades humanas.
4. Elaborar el té helado a una temperatura adecuada en una urna completamente limpia y limitar el tiempo que se mantiene a temperatura ambiente antes de servirlo minimizará el riesgo teórico de contaminación bacteriana.
Recomendaciones para la seguridad del té helado
* El té helado debe elaborarse a 195 F durante 3-5 minutos.
* El té helado debe almacenarse durante no más de 8 horas.
* La cafetera, el dispensador de almacenamiento y el grifo deben limpiarse diariamente.
Los CDC afirmaron que rediseñar los dispensadores de té para que sean más fáciles de desmontar y limpiar podría reducir aún más el riesgo teórico de contaminación bacteriana del té helado.
Té al sol
Según los CDC, «la práctica de preparar ‘té al sol’ dejando reposar las bolsitas de té en un recipiente con agua al sol puede suponer un riesgo teórico mayor que el de preparar el té a temperaturas más altas, ya que proporciona un entorno en el que es más probable que las bacterias sobrevivan y se multipliquen.
Tendré que decírselo a mi madre.