Aunque pasan la mayor parte de su vida nadando entre los tentáculos de su anémona anfitriona, el pez payaso común sale ocasionalmente para alimentarse. Son recolectores de plancton, lo que significa que buscan y comen visualmente zooplancton individual o fitoplancton que flota en la columna de agua. También es probable que coman algas de la superficie del arrecife. Debido a la protección que les ofrecen sus anémonas anfitrionas, los peces payaso comunes tienen pocos depredadores, pero corren el riesgo de ser depredados cuando abandonan la anémona para alimentarse.
El ciclo de vida del pez payaso común es tan interesante como raro. Como todos los peces payaso, esta especie cambia de sexo a lo largo de su vida. El cambio de sexo no es especialmente raro, pero la mayoría de las especies cambian de hembra a macho. Los peces payaso cambian de macho a hembra. Todos los individuos nacen como machos y finalmente se unen a grupos de unos pocos individuos que viven juntos en una anémona. El individuo más grande de cada grupo es la única hembra, y ella y el macho más grande son los únicos que se reproducen. La hembra grande y dominante pone sus huevos en la superficie del arrecife y el macho los fertiliza. Juntos, protegen el nido de los depredadores de los huevos hasta que éstos eclosionan. Si algo le ocurre a la hembra, el macho reproductor cambia de sexo, convirtiéndose en la hembra dominante. El siguiente macho más grande pasa entonces a ser reproductivamente activo, y los otros machos del grupo siguen siendo subordinados.
El pez payaso común es extremadamente popular en el comercio de acuarios. Algunos individuos son de color naranja brillante y blanco, mientras que otros son de color negro oscuro y blanco. Los colores marcados y la relación con las anémonas hacen que esta especie sea muy deseada para los acuarios públicos y privados. Durante mucho tiempo se han recolectado para su venta en esa industria, pero los recientes esfuerzos para promover la reproducción en cautividad han tenido éxito, por lo que muchos de los individuos a la venta en las tiendas de mascotas han sido criados en acuarios. Actualmente se desconoce el estado de conservación de esta especie, pero es probable que se haya agotado en algunas zonas como consecuencia de su recolección para el comercio de mascotas. Afortunadamente, el continuo desarrollo de un programa de cría en cautividad ha reducido la presión sobre las poblaciones silvestres.
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