Una manzana al día mantiene alejado al médico, dice el viejo refrán. Esta deliciosa fruta roja está repleta de nutrientes y ayuda a combatir todo tipo de dolencias. Y, por supuesto, las manzanas recién cogidas y maduras tienen un sabor dulce y jugoso en cada bocado. Pero, ¿cuáles son los numerosos beneficios para la salud de las manzanas y cuál es la forma correcta de tomarlas para obtener los máximos beneficios de ella
Beneficios para la salud
Comer una manzana todos los días refuerza el sistema inmunológico y promueve no sólo el bienestar físico, sino también el emocional. Los nutrientes presentes en la fruta incluyen poderosos flavonoides, antioxidantes, minerales, vitaminas y fitoquímicos que ayudan a combatir enfermedades. Por lo tanto, el consumo diario de manzanas frescas puede reducir el riesgo de derrames cerebrales, presión arterial alta, indigestión, asma, cáncer, enfermedades cardíacas, diabetes y otras enfermedades crónicas.
La manzana también mantiene la piel flexible y radiante. Tiene altas cantidades de agua y fibra que ayudan a mantener el tracto digestivo limpio y el peso corporal bajo control. Su consumo trata las deficiencias de vitaminas y minerales y sus síntomas asociados.
La forma correcta de tomar manzanas
Comer con la piel: Comer las manzanas con la cáscara es la mejor manera de obtener todos sus beneficios para la salud. El contenido de antioxidantes está contenido principalmente en su cáscara, según los estudios. La gran cantidad de contenido en fibra evita la coagulación del colesterol y mantiene el corazón sano.
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Comer regularmente: Comer manzanas con regularidad puede eliminar todas las toxinas del hígado. Según investigadores del Reino Unido, los adultos que comen dos manzanas a la semana pueden reducir el riesgo de asma hasta en un tercio. En otro estudio, se comprobó que las mujeres embarazadas que comían manzanas, sus hijos eran comparativamente menos propensos al asma en sus primeros cinco años. Debido a los altos niveles de antioxidantes, las manzanas parecen tener un efecto antiasmático más fuerte que cualquier otro alimento.
Mastícalas bien: Masticar una manzana crujiente puede mejorar la salud de las encías. El movimiento repetido de la mandíbula aumenta la circulación sanguínea en las encías. Son un refrescante bucal natural que contiene las células aromáticas de su piel. Contienen unos compuestos llamados taninos que pueden ayudar a prevenir las enfermedades de las encías.
Come manzanas cada pocas horas si sufres una infección de estómago: Las manzanas contienen más pectina que cualquier otra fruta. Así que, si tienes diarrea, intenta comer una manzana cada pocas horas. Estimula la producción de anticuerpos y glóbulos blancos que ayudan a combatir las enfermedades. La manzana es una fruta apta para la diabetes. Puede reducir el riesgo de complicaciones relacionadas con la diabetes.
Come manzanas frescas: Se dice que las manzanas recién recogidas no tienen grasa, ni colesterol, ni sodio, y son ricas en fibra y antioxidantes naturales llamados polifenoles. Comer manzanas puede ralentizar los efectos del envejecimiento y promover la salud de los huesos.
Incluye las manzanas en tu dieta diaria y comprueba los milagrosos beneficios para la salud.
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