Una lesión aguda es, por lo general, una lesión grave y de aparición repentina. Los esguinces de tobillo, las distensiones de espalda y las fracturas de manos son lesiones agudas. Una lesión aguda es una lesión repentina que suele estar asociada a un acontecimiento traumático, como un choque con otro jugador durante la práctica deportiva o una caída de la bicicleta. Un impacto traumático puede hacer que el hueso se rompa, los músculos se desgarren o los ligamentos se rompan. Experimentarás un dolor agudo y repentino que suele ser intenso, una hinchazón inmediata e incluso regiones moradas y frías en tu cuerpo que indican una falta de circulación sanguínea adecuada en esa parte lesionada. Incluso puede perder la estabilidad si los ligamentos de la rodilla están rotos y no podrá colocar el peso de su cuerpo sobre ella. Estos son los principales ejemplos de lo que es una lesión aguda. Una lesión aguda suele ser el resultado de un impacto específico o un acontecimiento traumático que se produce en una zona concreta del cuerpo, como el desgarro de un músculo, la rotura de un hueso o una lesión en la articulación. El dolor agudo de una lesión suele requerir atención médica inmediata. Si sospecha que su lesión es grave, debe acudir al servicio de urgencias. Los siguientes síntomas pueden ser un signo de una lesión grave que requiere atención profesional: hinchazón y dolor intensos, sonido de crujido o estallido de la zona lesionada, deformidades visibles, incapacidad para soportar el peso en la zona lesionada, dificultad para respirar, fiebre o mareos.
De todos modos, algunos dolores o lesiones agudas pueden tratarse en casa con el tratamiento del arroz. Descansar, poner hielo en la zona, comprimir o inmovilizar la zona lesionada y elevar la zona lesionada por encima del corazón minimizará la hinchazón y el dolor. También debe acudir a un médico para que le haga una evaluación adicional si después de haber probado el tratamiento en casa con el método del arroz sigue teniendo dolor o inestabilidad.