Pregunta: «¿Quiénes son los Discípulos de Cristo y en qué creen?»
Respuesta: Los Discípulos de Cristo (DOC), oficialmente llamados Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) es una denominación que enfatiza la unidad cristiana, la inclusión y la acción social. Su declaración oficial de identidad, extraída de su página web, dice que son «un movimiento por la integridad en un mundo fragmentado. Como parte del único cuerpo de Cristo, acogemos a todos en la mesa del Señor como Dios nos ha acogido a nosotros». En 2010, la denominación contaba con unos 691.000 miembros y más de 3.700 iglesias en Norteamérica.
El movimiento de los Discípulos de Cristo es en realidad parte del Movimiento de la Restauración, más amplio, iniciado a principios del siglo XIX por dos hombres, Alexander Campbell y Barton Stone. Estos dos hombres lideraban sus propios movimientos religiosos en dos estados distintos de Estados Unidos antes de reunirse en Georgetown, Kentucky, en 1824. Al darse cuenta de que compartían muchas de las mismas creencias y deseos para la iglesia, combinaron sus grupos y comenzó el Movimiento de la Restauración. Más tarde, en 1906, se formó la Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) como parte de un cisma, que también produjo las Iglesias de Cristo (no instrumentales) y la Iglesia Cristiana Independiente.
Al igual que otras iglesias del Movimiento de Restauración, algunas iglesias de los Discípulos de Cristo creen que un cristiano puede perder la salvación. La DOC enseña el sacerdocio de todos los creyentes y por lo tanto no es jerárquica en la política de la iglesia. Enseñan el bautismo del creyente por inmersión y, por lo tanto, no bautizan a los bebés. La iglesia también pone un gran énfasis en la comunión, simbolizada por el cáliz que utilizan como logotipo de su denominación; la mayoría de las congregaciones de Discípulos de Cristo observan la comunión cada semana.
La Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) utiliza un leccionario, una colección de lecturas de las Escrituras preseleccionadas para el culto y el estudio. Muchas congregaciones también siguen los tiempos litúrgicos, empezando por el Adviento e incluyendo la Navidad, la Epifanía, la Cuaresma, la Pascua y Pentecostés. Sin embargo, ninguna congregación está obligada a seguir el calendario litúrgico.
A la Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) no le gustan las etiquetas denominacionales y evita poner a los cristianos «en una caja». Creen que los cristianos pueden tener una variedad de diferencias doctrinales. «Unidad, no uniformidad», es una de sus máximas. La confesión oficial de la denominación es corta y sencilla, evitando afirmaciones detalladas sobre la doctrina más allá de afirmar que Cristo es Señor y Salvador. Son un grupo muy fluido, que une a muchas personas de creencias muy diferentes.
No hay una «prueba de fe» para unirse a la Iglesia Cristiana. La Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) deja que las congregaciones individuales y los cristianos individuales crean y practiquen lo que quieran. Su falta de límites doctrinales definidos ha dado lugar a que la denominación se convierta en una de las iglesias teológicamente más liberales de América hoy en día. La DOC ordena a las mujeres como pastoras. En julio de 2013, la Asamblea General de los Discípulos de Cristo aprobó una resolución que afirmaba que las personas abiertamente homosexuales eran bienvenidas como miembros y líderes en su iglesia. Su iglesia también ha apoyado sistemáticamente la legalización del aborto. Las doctrinas del cielo y el infierno se consideran «especulativas», y la DOC no toma ninguna posición oficial sobre ninguna de ellas.
Primera de Corintios 15:58 dice: «Queridos hermanos y hermanas, manteneos firmes. No dejen que nada los mueva. Entrad siempre de lleno en la obra del Señor, porque sabéis que vuestro trabajo en el Señor no es en vano.» En su énfasis en la participación de la comunidad, los miembros de los Discípulos de Cristo tratan de cumplir la segunda mitad de este versículo, y su compromiso con la unidad cristiana es ciertamente encomiable. Pero no debemos pasar por alto el mandato de la primera mitad del versículo, de «permanecer firmes» y ser inamovibles en nuestra doctrina. Evitando las declaraciones doctrinales, la Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) se ha alejado de la sana doctrina. ¿Cómo puede una iglesia «mantenerse firme» si no sabe cuál es su posición en temas importantes? ¿Cómo puede una iglesia «probar los espíritus» (1 Juan 4:1) si no hay pruebas teológicas?