Todos intentamos mantener la calma, pero a veces la vida se vuelve demasiado abrumadora para soportarla. Nos lleva a nuestros límites y pone a prueba nuestra cordura hasta que no podemos soportarlo más y nos rendimos a la ansiedad y la depresión.
Lo que tienes que entender es que aunque te sientas rota por dentro, el dolor que estás experimentando es solo la vida dándote una lección.
Todo lo que tienes que hacer en esos momentos es dar un paso atrás y permitirte sentir todos los sentimientos que necesitas para salir adelante. Esto no sólo aliviará tu mente sino que te hará más fuerte de lo que eras antes.
Esto es lo que debes recordar cuando te sientas desesperado y solo.
La vida es una serie de altibajos.
Todo es una gran montaña rusa de emociones. El viaje puede ser bastante accidentado a veces, pero sigue siendo emocionante. Lamentablemente, a veces nos tomamos la vida demasiado en serio para apreciar toda la experiencia. Y al centrarnos en las cosas negativas que ocurren, nos olvidamos de agradecer las buenas. Disfruta de tu vida mientras dure, porque nadie podría devolverte tu juventud, tu tiempo y tus esperanzas perdidas. Estos momentos difíciles que estás atravesando están aquí para mostrarte lo que realmente importa y para enseñarte a apreciar la vida mientras puedas.
Enfócate en las cosas que despiertan la alegría en ti.
Nuestras vidas de repente se vuelven demasiado ocupadas y abrumadoras, y apenas tenemos tiempo para detenernos a oler las flores. Asegúrate de no olvidarte de apreciar la belleza de las cosas que hacen que tu corazón lata. Pasa tiempo con las personas que te hacen sentir excepcional y que te motivan a convertirte en la mejor versión de ti mismo. O pasa un tiempo a solas, haciendo cosas que realmente te gustan y disfrutas. No te definas por la tristeza que estás experimentando en ese momento. Eres luz, poder y brillo. Abraza eso.
Las estrellas no brillarían sin la oscuridad.
Si no fuera por esos momentos oscuros en los que te sientes roto e impotente, no serías capaz de ver toda la belleza de las cosas que hacen tu vida increíble. Desgraciadamente, a veces hacen falta unos cuantos corazones rotos para reconocer lo bueno que hay en el mundo. Las grietas en tu alma permiten que la luz llegue a tu interior. Si sólo tuvieras experiencias positivas todo el tiempo, no tendrías la oportunidad de crecer y fortalecer tu mente.
Hay personas en tu vida que están ahí para ti.
Tienes amigos y familiares que estarán ahí para ti y te apoyarán sin importar el reto que te traiga la vida. Te ayudarán a atravesar todas las luchas y a superar los abrumadores obstáculos que se presenten en tu camino. Es más, los momentos difíciles te abren los ojos a las personas auténticas que te rodean y a las que están ahí sólo cuando te necesitan. Los auténticos se quedarán, aunque seas un desastre, aunque no tengas nada que ofrecer y aunque les digas que se vayan. El resto desaparecerá uno a uno. Esto te enseñará una de las lecciones de vida más hirientes, pero valiosas: las personas de confianza son extremadamente raras.
No luches contra tus sentimientos. Enfréntate a ellos.
Eres un simple ser humano con una variedad de sentimientos y emociones. Tu mente está programada para reaccionar de forma diferente ante distintas situaciones. No es una debilidad sentirse desesperado cuando sucede algo devastador. No es una fortaleza permanecer frío como una piedra y reprimir tus emociones. Ocultar tus sentimientos y reprimirlos tarde o temprano se volverá contra ti. Pero si te permites expresar tus emociones, serás capaz de enfrentarte a ellas y de encontrar una forma eficaz de afrontarlas. Deja que tu alma respire.
Tu ruptura NO lo es todo.
Quizás ahora mismo sientas que este dolor que estás experimentando lo es todo, pero hay mucho más en la vida. Después de todo, todavía puedes respirar aire fresco, ver las hipnotizantes puestas de sol y escuchar la cautivadora melodía de tu canción favorita. Aunque ahora estés destrozado, todavía puedes experimentar toda esta belleza. A pesar de tu caída temporal, hay muchas cosas asombrosas e inspiradoras sucediendo en el mundo que te rodea.
Tu dolor NO te define.
Recuerda que nada en la vida es permanente, incluido tu dolor. Los momentos difíciles pasarán, y la ligereza llegará a tu vida, siempre que tú lo permitas. Por lo tanto, no te identifiques con las luchas contemporáneas que estás atravesando. Tus emociones son una parte esencial de tu ser, pero no lo son todo. No dejes que controlen toda tu vida.
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