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Tú y tus hormonas

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Nombres alternativos de la hormona liberadora de corticotrofina

Hormona liberadora de corticotrofina; factor liberador de corticotrofina; factor liberador de corticotrofina; corticoliberina; CRH; CRF

¿Qué es la hormona liberadora de corticotrofina?

La hormona liberadora de corticotrofina es secretada por el núcleo paraventricular del hipotálamo que, entre otras funciones, libera hormonas. La hormona liberadora de corticotrofina tiene varias acciones importantes. Su papel principal en el organismo es el de impulsor central del sistema hormonal del estrés, conocido como eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal. La hormona liberadora de corticotrofina recibe este nombre porque provoca la liberación de la hormona adrenocorticotrópica desde la hipófisis. La hormona adrenocorticotrópica, a su vez, viaja por el torrente sanguíneo hasta las glándulas suprarrenales, donde provoca la secreción de la hormona del estrés, el cortisol.

La hormona liberadora de corticotrofina también actúa en muchas otras áreas del cerebro, donde suprime el apetito, aumenta la ansiedad y mejora la memoria y la atención selectiva. Juntos, estos efectos coordinan el comportamiento para desarrollar y afinar la respuesta del cuerpo a una experiencia estresante.

La hormona liberadora de corticotrofina también es producida a lo largo del embarazo en cantidades crecientes por el feto y la placenta, con los efectos de aumentar el cortisol. En última instancia, son los altos niveles de la hormona liberadora de corticotrofina los que, junto con otras hormonas, se cree que inician el trabajo de parto.

Por último, en cantidades más pequeñas, la hormona liberadora de corticotrofina también es producida por ciertos glóbulos blancos, donde estimula la hinchazón o sensibilidad conocida como inflamación, en particular del intestino.

¿Cómo se controla la hormona liberadora de corticotrofina?

La secreción de la hormona liberadora de corticotrofina es estimulada por la actividad nerviosa del cerebro. Sigue un ritmo natural de 24 horas en circunstancias no estresantes, donde es más alta alrededor de las 8 de la mañana y más baja durante la noche. Sin embargo, la hormona liberadora de corticotrofina también puede aumentar por encima de los niveles diarios normales por una experiencia estresante, una infección o incluso el ejercicio. Un aumento de la hormona liberadora de corticotrofina conduce a niveles más altos de la hormona del estrés, el cortisol, que moviliza los recursos energéticos necesarios para hacer frente a la causa del estrés. Unos niveles elevados de hormonas del estrés durante un periodo prolongado pueden tener efectos negativos en el organismo. Por ello, el cortisol bloquea la liberación continuada de la hormona liberadora de corticotrofina y desactiva el eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal, lo que se conoce como un bucle de retroalimentación negativa.

Algunos efectos de la hormona liberadora de corticotrofina en el cerebro también pueden ser bloqueados por la leptina, una hormona producida por el tejido graso. Esto puede ser en parte la razón por la que la hormona liberadora de corticotrofina puede controlar el apetito.

¿Qué ocurre si tengo demasiada hormona liberadora de corticotrofina?

Los niveles anormalmente altos de la hormona liberadora de corticotrofina están relacionados con una variedad de enfermedades. Debido a que estimula la ansiedad y suprime el apetito, se sospecha que un exceso de hormona liberadora de corticotrofina provoca problemas nerviosos como la depresión clínica, la ansiedad, los trastornos del sueño y la anorexia nerviosa.

Además, los niveles elevados de hormona liberadora de corticotrofina también pueden empeorar ciertos problemas inflamatorios, como la artritis reumatoide, la psoriasis, la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. En un principio, esto podría parecer inesperado, ya que el aumento de los niveles de la hormona liberadora de corticotrofina en el cerebro puede provocar un aumento de la producción de glucocorticoides, y los glucocorticoides tienen un efecto antiinflamatorio. Sin embargo, las investigaciones han revelado que cuando los niveles elevados de la hormona liberadora de corticotrofina se producen en los tejidos fuera del cerebro, en realidad pueden tener una potente acción inflamatoria. Por lo tanto, el aumento de los niveles de la hormona liberadora de corticotrofina en las articulaciones, la piel o el intestino puede empeorar estas afecciones inflamatorias o incluso desempeñar un papel en su desarrollo.

¿Qué ocurre si tengo muy poca hormona liberadora de corticotrofina?

Las investigaciones han demostrado que las personas con la enfermedad de Alzheimer tienen niveles especialmente bajos de la hormona liberadora de corticotrofina. Algunos científicos también sospechan que la falta de la hormona liberadora de corticotrofina podría causar el síndrome de fatiga crónica’ data-content=’1339′ >el síndrome de fatiga crónica, a veces llamado encefalomielitis miálgica, en el que los enfermos tienen problemas de sueño, memoria y concentración. Sin embargo, se necesitan más investigaciones sobre estos dos temas antes de poder confirmarlo.

Durante el embarazo, una baja producción de la hormona liberadora de corticotrofina por parte del feto o de la placenta puede provocar un aborto espontáneo.

Última revisión: Ene 2017

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