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El alcohol y la salud del corazón: Separando la realidad de la ficción

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¿Protege el alcohol contra los problemas cardíacos?

Algunos estudios han mostrado una asociación entre el consumo moderado de alcohol y un menor riesgo de morir por enfermedad cardíaca.

Pero es difícil determinar la causa y el efecto a partir de esos estudios, dice McEvoy. Tal vez las personas que beben vino tinto tienen mayores ingresos, que tienden a estar asociados con más educación y mayor acceso a alimentos más saludables. Del mismo modo, los bebedores de vino tinto podrían ser más propensos a seguir una dieta saludable para el corazón.

Existen pruebas de que el consumo moderado de alcohol podría ayudar a aumentar ligeramente los niveles de colesterol «bueno» HDL. Los investigadores también han sugerido que el vino tinto, en particular, podría proteger el corazón, gracias a los antioxidantes que contiene.

Pero no es necesario descorchar para obtener esos beneficios. El ejercicio también puede aumentar los niveles de colesterol HDL, y los antioxidantes pueden encontrarse en otros alimentos, como las frutas, las verduras y el zumo de uva

¿Cuánto alcohol es demasiado?

Si el consumo moderado de alcohol es bueno o no para el corazón es algo que está abierto a debate. Sin embargo, para la mayoría de la gente, no parece ser perjudicial para el corazón, dice McEvoy – pero la palabra clave es «moderado».

El consumo moderado de alcohol se define como una media de una bebida al día para las mujeres y una o dos para los hombres. Una copa puede ser menos de lo que se piensa: 12 onzas de cerveza, 4 onzas de vino o 1,5 onzas de licores de 80 grados.

Algunas personas deberían evitar incluso esa cantidad, añade McEvoy. Aconseja a los pacientes que no beban en absoluto si tienen ciertas anomalías del ritmo cardíaco o sufren insuficiencia cardíaca. «Hay ciertas situaciones en las que es mejor que el paciente no beba nada de alcohol», dice.

¿Contribuye el consumo excesivo de alcohol a las enfermedades del corazón?

El consumo excesivo de alcohol, por otra parte, está vinculado a una serie de resultados de mala salud, incluidas las afecciones cardíacas. El consumo excesivo de alcohol puede provocar hipertensión arterial, insuficiencia cardíaca o infarto. El consumo excesivo de alcohol también puede contribuir a la cardiomiopatía, un trastorno que afecta al músculo cardíaco.

Además, el alcohol puede contribuir a la obesidad y a la larga lista de problemas de salud que pueden acompañarla, afirma McEvoy: «El alcohol es una fuente de exceso de calorías y una causa de aumento de peso que puede ser perjudicial a largo plazo.»

La conclusión, según McEvoy, es lo que probablemente ya sabías: si decides beber alcohol, limítate a niveles moderados de consumo y no te excedas. «No estamos hablando de salir y beber alegremente y luego esperar buenos resultados para el corazón», dice McEvoy.

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